[IMAGEN: Axl Rose, Bret Michaels, Eddie Van Halen y Bunbury]
Un consejo habitual a la hora de hacerse un tatuaje es
elegir algo realmente importante para cada uno,
algo que no sea pasajero (debería estar prohibido por ley imprimirse en
la piel el nombre de la pareja sentimental de turno), algo con
auténtico significado. Por eso no extraña que sean muchos los músicos
que lucen en diversas partes de sus cuerpos los logos de sus bandas,
títulos de sus discos o canciones, apodos artísticos, estrofas de
canciones o imágenes de las portadas de sus álbumes.
Después de todo, aunque el tiempo pase y lo arrase todo, la música
sigue ahí cobrando nuevos significados para cada nuevo oyente. Y de
alguna manera, los artistas tienen así una manera de recordarse a sí
mismos el sentido creativo último de sus vidas. Por ejemplo, por mucho
que Axl odie a Slash, cada vez que mire su antebrazo derecho tendrá bien
presente que los Guns n' Roses originales hicieron algo realmente
grande para la historia del rock. He aquí algunos ejemplos de músicos
tatuados con motivos relacionados con sus creaciones artísticas.
BUNBURY
Diseñado por el estudio madrileño de Pedro Delgado en los tiempos de
El Mar No Cesa, a finales de los ochenta, el 'escudo' de Héroes del
Silencio fue evolucionando a lo largo de los años hasta una sencilla
combinación de las letras H y S. Enrique luce muchos tatuajes, aunque
sin duda el más llamativo (y el más imitado por sus fans) es el logo de
la banda zaragozana que luce en su hombro derecho desde hace décadas.
Ahí sigue y ahí seguirá, pues aunque su éxito como solista esté más que
consolidado a ambos lados del Atlántico, ser el vocalista de Héroes del
Silencio es algo que marca, deja huella y estigmatiza, para bien y para
mal.
AXL ROSE
El líder de Guns n' Roses comenzó a ilustrar su cuerpo a mediados de
los ochenta, antes de que la banda se conviritiera en la última gran
esperanza blanca del rock. La cruz que luce en su antebrazo derecho la
diseño Bill White Jr y se la dibujó en un estudio del Sunset Strip de
West Hollywood después de firmar el contrato discográfico con Geffen
Records. Esta imagen terminó convirtiéndose en legendaria al ser usada
como alternativa de urgencia para la portada censurada del Appetite for
Destruction.
OZZY
Original como no podría ser de otra manera, el jovenzuelo John
Michael Osbourne se tatuó él mismo con una aguja de coser y un trozo de
grafito su primer tatuaje, mientras estuvo en la cárcel por robar un
televisor en su Birmingham natal. Tampoco es que el futuro líder de
Black Sabbath se complicara mucho la vida en este caso, pues se limitó a
imprimirse las letras con su ahora legendario apodo rockero en sus
nudillos. Nunca nadie hubiera imaginado lo que le deparaba el futuro.
EDDIE VAN HALEN
Van Halen tienen uno de los logotipos más reconocibles de la historia
del rock. Por eso no es de extrañar en absoluto que su carismático y
virtuoso guitarrista haya plasmado su amor por la banda tatuándose dicho
logo en uno de sus brazos. Para hacerlo algo más personal, lo acompaña
del nombre Wolfgang, que es como se llama su hijo y actual bajista del
grupo californiano.
LEMMY KILMISTER
El pétreo líder de Motörhead no tiene demasiados tatuajes, pero desde
luego el que lleva en su antebrazo derecho es toda una declaración
vital de intenciones. "Born to lose, live to win" es la inapelable
leyenda que exhibe orgulloso Lemmy, y que además aparece en una cantidad
importante de artículos de merchandising relacionados con la banda.
Asimismo, Iron Horse/Born to lose es el título de una de sus canciones.
STEVE HARRIS
El antebrazo derecho es la parte de su cuerpo donde el bajista de
Iron Maiden decidió prestar un hueco a Eddie, famosa mascota de la
banda, tal y como aparece en la portada de The Trooper. Harris argumenta
que decidió hacerse este tatuaje en particular porque Eddie representa a
la perfección lo que es Iron Maiden y, además, sale con la Union Jack
británica. Patriotismo y toda una vida dedicada el rock aglutinadas en
el mismo dibujo.
BRET MICHAELS
El vocalista de Poison sabe que le debe tanto a su banda que lleva un
pedazo de tatuaje bien visible y a todo color en su brazo derecho. Del
botox posterior a esta imagen mejor no hablar.
HENRY ROLLINS
El músico estadounidense es de esos que no tienen miedo de convertir
su cuerpo en todo un lienzo. De entre todos sus tatuajes, llama
especialmente la atención el sol que lleva en su enorme espalda, pues
corresponde a la portada de su disco con la Rollins Band de 1992 The End
of Silence. Sobre su piel, el astro rey va acompañado de leyenda
"search and destroy".
SEBASTIAN BACH
Entre la multitud de diferentes tatuajes que recorren su cuerpo, el
que fuera vocalista de Skid Row lleva siempre bien visible en su
antebrazo izquierdo el título de uno de los mayores éxitos de su antigua
banda, Youth gone wild. La canción, publicada originalmente en 1989, se
convirtió instantáneamente en un himno de rebeldía para los jóvenes
rockeros de finales de los ochenta.
SLASH
No, no va a suceder. O seguramente sí, porque lo lleva por ahí. Pero
el tatuaje del por siempre guitarrista de Guns n' Roses no tiene nada
que ver con pistolas y rosas, sino con terciopelos y tal. A ver, sí,
tiene otros que significan otras cosas y recuerdan a otras bandas, pero
ahora nos fijamos en este, con la silueta de la mujer que aparece en la
portada del primer disco de otro de sus grupos, Velvet Revolver.